viernes, 4 de octubre de 2013

Caperucita Roja es un cuento que en su sencillez se ha convertido en algo universal, archiconocido, muy citado, muy traído y llevado para unas cosas y para otras.
"La Regenta" es un libro de unas ochocientas páginas, como "Ana Karenina" que cuentan los dos una historia maravillosa, muy bien escrita, con mucha crítica social, con un personaje femenino muy bien trazado, con una trama compleja, interesante y muchos otros logros literarios en su creación que hace de las dos obras unos libros emblemáticos de un época, el siglo XIX.
Pero es que tienen ochocientas páginas, señor mío.
No hay tiempo, en estas épocas que llevamos, para leer las instrucciones del lavavajillas, cómo va a haber tiempo para leerse 800 páginas por muy bien escritas que estén.
¿Alguien cita a La Regenta personaje o a Ana Karenina para hablar de adulterio? Son demasiado complejos y desconocidos para ponerlos de ejemplo.
Cuando estamos riéndonos de algo festivo, sexual, dramático, aleccionador, inocente, etc invocamos a Caperucita porque es fácil de aprender y es un personaje más plano que una oblea y la conocen hasta en Pekín. Seamos populares y no cansemos con prolijidades de otras épocas. Lo breve si bueno...

No hay comentarios:

Publicar un comentario